Usted puede abordar el barrio por los « quais », que van a lo largo del Garona.
Es un lugar muy acogedor donde se puede dar de paseos largos, ir en el skate park, beber un café, ir al restaurante, hacer las tiendas (que se encuentran en los antiguos almacenes).
Los Bordeleses se encuentran allí al el menor rayo de sol. El domingo, vamos al mercado, que es muy tendencia: es chic de ir a comer algún huitres de Arcachon o del "bibiches" (las gambas del estuario).
¡ Usted podrá fácilmente compartirlo estos instantes de felicidad tomando una bicicleta en los Quinconces ! Usted puede también pedir prestado desde el Jardin Public el curso Xavier-Arnozan, la « avenida Foch " de Burdeos, con sus hoteles particulares adornados de puertas imponentes y de hermosos balcones, como el hotel Ferwick, al número 4, con su entrada condecorada por proas de buque.
Encontramos sobre los quais de otros bellas fachadas, entre las que están dos más antiguo: las jumelles hollandaises a los números 28 y 29.
Al ángulo de los quais, no carezca del CAPC, el Museo de arte contemporáneo: podemos quedar insensible a las colecciones presentadas pero no al grandor de los lugares, el antiguo almacén a los pasosde catedral.
Para penetrar al corazón de los Chartrons, tome la calle Notre-Dame, que reúne todos los encantos del barrio. Y primero los anticuarios que se instalaron allí, el más antiguo está en el número 67 y son en resumen aproximadamente 60.
¡ El corazón del barrio está bien en el calor bajo la plaza, pero mire lo que le rodea! Por ejemplo, el 29 sorprenden por su arquitectura de inspiración morisca. Se trata de unos antiguos baños turcos que datan del XIX e el siglo, hoy transformados en garaje.
Podemos admirar la iglesia Saint Louis Des Chartrons: tiene un órgano magnífico de tribuna.
Reúna la plaza del Marché des Chartrons, no hay más mercado, pero la plaza del XIX e siglo está siempre allí. Debía ser afeitada pero una asociación de vecinos la salvó en 1992. Restaurada, se hizo un lugar cultural, con conciertos, exposiciones, festivales. Hasta hay en el momento de la Primavera de los poetas, organizado un mercado de la poesía por Jean Paul Brussac. Tenemos por todos lados terrazas, cafés, salones de té. Es aquí dónde late el corazón del barrio de Chartrons.
A mi gusta mucho ir al mercado de los Chartrons los domingos y si quieres usted puede también comprar frutos y legumbres para a semana. Los precios no son muy altos... :)
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